En las inmediaciones de las calles Santa Elena y Blas Parera, en el barrio San Juan de Dios, vivía una familia humilde que se ganaba la vida con la compra-venta de elementos usados de todo tipo. Esta mañana alrededor de las 7, tres dotaciones de bomberos debieron acudir al lugar para sofocar las llamas que terminaron causando pérdidas totales, tanto en la precaria vivienda como en el depósito de chatarra.

La sirena del cuartel central convocó a los servidores públicos que no pudieron salvar demasiadas pertenencias aunque si corroboraron que la familia resultó ilesa.